El pasado mes de octubre, tuvo lugar un almuerzo coloquio de la mano del maestro Antonio López, que reivindicó la virtud técnica, la emoción y la luminosidad para erradicar “la oscuridad que tanto nos fascina”.
El aclamado pintor anuncia que desea retratar “la vida moderna” y lamenta que muchos artistas están desorientados porque la sociedad les ha abandonado.